(à Minha Dulcinea)
Fuerza, Dulcinea, amada mia...
Recordate todas las victorias:
Molinos y Vientos
vencidos
Gigantes días de glória
Recordate del ardor que vos tenía:
La pasión sola y ciega espera
Grita -
danza y vibra
Recordate de su encantadora poesía:
Grabada en tinta - aún fresca
Que la blanca tez vestía
Recordate todo que deslumbrante irradia:
El amor que irrumpe a los siglos
En el alma sigue y brilla...
Y no importa
cuán grande es la mancha que acecha...
Pues trás esa
mancha hay una luz
Caliente y afable,
en tu pecho
Antigua, llamándote
Y puede haber
montañas
Y revueltos mares
Y desiertos
Pues el amor
que tenemos mueve
Montañas,
divide los mares
Inunda los desiertos
Y despues de
nosotros
No
permanecerá
Piedra alguna...
Fuerza, Dulcinea, amada mia...
F.
BULA:
Mais uma homenagem...
Na foto a escultura em El Toboso, "Patria de Dulcinea", província de Toledo, Espanha.
"La Mancha"
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